Mi corazón sigue en ayuno, en un costante ramadam
es el tam-tam del tambor del hechicero del clan.
Es otro texto escrito, otro grito,
otra erupcion del volcan y mis palabras donde iran,
esas gentes donde iran, de trajes y corbatas lujos de plata
y cristal abrazando sus maletas con instinto maternal
Aquí no hay final feliz hundido en negro ni aplausos,
gesto serio, oido atento es el afecto que causo.
Doble hache mi fetiche, mientras me achucha la noche
escuche señora no me reproche de tranqui
asi que toma tu brandi, fumate y escapate,
que el verso actue, penetre y te tatue, lo que detesto
lo pongo de manifiesto entre hermanos,
y 20 años no son nada dice el tango,
por eso en mi pecho ya no hay medallas ni rangos
asi joven, listo y con energía