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Comer los bordecitos de las remeras, el olor a pintura y limon, dormir para calmarme ,ver como otros juegan a los jueguitos, aspirar la gelatina y la espuma de la cerveza, hacer garabatos, ojos color miel, risas de bebes, tronar los dedos, abrigarme, hacer que no escucho, leer msjs viejos,las nubes, comer picadillo con el dedo, morderme los labios, sonrisas afinadas, mear con la puerta abierta y esquivar las lineas en el piso.

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Daño cerebral:

Muchas personas piensan que estar solo mucho tiempo puede ser enfermizo, perjudicial
y para nada interesante, que las relaciones sociales son el punto de partida para el éxito, pero yo, por mi parte pienso que el éxito en si no tiene punto de partida ni embrión, llega de pronto cuando uno se supera a si mismo sin buscar aceptación ajena. Esto que paso, lo tomo como una experiencia, hasta el día de hoy, veo mi pasado solitario, gris y diminuto, sentirse un punto gris en un mundo de garabatos de colores, esa fue mi historia.
Todavía me acuerdo aquel primer día de clases, en aquella escuelita secundaria llena de tierra en un pueblo en las afueras del litoral argentino, que tantos traumas severos causó.
 Para muchos puede ser normal un cambio de escuela a los 14 años o en la adolescencia, en mas, lo ven como algo totalmente positivo y purificador, a mi me hartaba, cada vez se me hacia mas difícil adaptarme y mostrarme como soy . La razón mas importante sin duda fue el acoso escolar, llegue hasta a estar 1 hora en un tacho de basura intentando salir, empujado por una escalera de 1 metro o correr hasta mi casa, entre otras cosas, lo peor de todo es que nunca supe defenderme ya que no soy muy grande de tamaño y nunca intente hacerle daño a nadie. Todo esto lógicamente generaba trastornos, visite el psicólogo en varias ocasiones pero me dormía durante las sesiones o me aburría con preguntas que consideraba tontas y mi mente me contaba historias mientras él hablaba, lo único divertido en mi vida era encontrar momentos donde huía de la realidad  y jugaba con algún personaje con el que soñaba ser. En resumen eso fue un poco de mi pasado, pero ahora me encontraba en frente de un nuevo destino.

Los pasos cada vez eran mas distorsionados, los nervios me iban carcomiendo los pensamientos y la suela de mi zapato izquierdo, los escalofríos subían desde mis tobillos (a los cuales el pantalón de mi hermano no llegaban) mis grandes ojos verdes atentos al camino, queriendo escapar de mi cara, a medida que me acercaba, mas pequeño me hacia, por suerte llegue temprano, 1 hora antes.